Gazpacho
andaluz
(desde www.acocinar.com )
Quizás decir gazpacho andaluz, sea una
redundancia, pues aunque ahora se puede encontrar en la carta de restaurantes
de Chicago o de Nueva York, el gazpacho es indefectiblemente andaluz.
Esta es una de las mil formas de preparar este plato, el más internacional de
la cocina andaluza y a la vez el más popular. El gazpacho, en verano, formaba
parte importante de la dieta del campesino andaluz y el arte de prepararlo, corría
parejo al arte del "majado" de sus componentes en el mortero,
dornillo o almirez. En la actualidad, la batidora eléctrica ha simplificado
enormemente su realización y se consigue hacer un magnífico gazpacho en un
abrir y cerrar de ojos.
Existen gran cantidad de recetas para preparar
esta sopa fresca, incluso podéis visitar una página dedicada exclusivamente al
gazpacho en el que se dan recetas de sus diversas variantes.
Yo, después de muchas pruebas, he adoptado esta, en la que si os dais cuenta, a diferencia de la mayoría de las que encontraréis por ahí, no empleo pan, pues he comprobado que de esta forma puedo conservar el gazpacho más tiempo, ya que la levadura del pan hace que en pocos días se produzca una cierta fermentación que deja el gazpacho agrio e incomestible.
Yo, después de muchas pruebas, he adoptado esta, en la que si os dais cuenta, a diferencia de la mayoría de las que encontraréis por ahí, no empleo pan, pues he comprobado que de esta forma puedo conservar el gazpacho más tiempo, ya que la levadura del pan hace que en pocos días se produzca una cierta fermentación que deja el gazpacho agrio e incomestible.
Ingredientes para 6 personas
2 kilos de tomates rojos maduros
2 pimientos verdes, de los de freír
2 dientes de ajo
1 pepino pequeño
1 vaso y 1/2 de los de agua, de aceite de oliva
1/2 vaso de vinagre de vino
Sal
Preparación
En un bol grande se echan, lavados y troceados,
los tomates, los pimientos, los ajos y el pepino previamente pelado. Se añade
el aceite, el vinagre y la sal y se bate bien con una batidora. Una vez batido
se pasa por un pasapurés para quitar las pieles y las pepitas del tomate y el
pimiento. Si lo encuentras muy espeso, puedes añadirle agua, hasta darle la
textura que más te guste. Se rectifica de sal y se mete en el frigorífico en un
recipiente tapado.
Por lo que hace referencia al acompañamiento, que
se coloca aparte para que cada comensal se sirva a su gusto, yo he visto de
todo, hasta taquitos de jamón. Lo ideal es poner un amplio surtido de
"tropezones", siempre cortados en daditos pequeños: tomate, pimiento,
cebolla, pepino, huevo duro, pan frito, jamón, etc.
Presentar en un bol grande y los tropezones en
bandejitas individuales. Servir bien frío en tazas de consomé. Hay quien lo
bebe en vaso y sin tropezones.
Gazpacho
andaluso
Forse, dire gazpacho
andaluso è una ridondanza, perché anche se ora si può trovare nel menù di
ristoranti a Chicago o New York, il gazpacho è, senza ombra di dubbio, andaluso.
Questa è una delle
mille maniere di preparare questo piatto, il più internazionale della cucina
andalusa e nello stesso tempo il più popolare. Il gazpacho, in estate, formava
parte importante della dieta del contadino andaluso, e l’arte di prepararlo era
legata all’arte della pestatura dei suoi componenti nel mortaio o ciotola di
legno. Nell’attualità, il frullatore elettrico ha semplificato enormemente la
sua realizzazione e si riesce a fare un magnifico gazpacho in un batter d’occhio.
Esiste una grande
quantità di ricette per preparare questa zuppa fredda, potete perfino vedere
una pagina web dedicata esclusivamente al gazpacho dove si presentano ricette
delle sue numerose varianti. Io, dopo molte prove, ho adottato questa, nella
quale, se ci fate caso, a differenza della maggioranza che troverete lì, non
utilizzo pane. Ho infatti verificato che in questa maniera posso conservare il
gazpacho più a lungo, visto che il lievito del pane, dopo pochi giorni, produce
una certa fermentazione che lascia il gazpacho acido e incommestibile.
Ingredienti per 6
persone
2 chili di pomodori
rossi maturi
2 peperoni verdi
(quelli da frittura)
2 spicchi d’aglio
1 cetriolo piccolo
1 bicchiere e ½ (da
acqua) di olio d’oliva
½ bicchiere di aceto di
vino
Sale
Preparazione
In un tegame grande si
mettono, lavati e sminuzzati, i pomodori, i peperoni, l’aglio e il cetriolo
previamente pelato. Si aggiunge l’olio, l’aceto ed il sale e si frulla bene con
un frullatore. Una volta frullato, si passa per un passaverdura per togliere le
pelli e i semi dei pomodori e dei peperoni. Se lo trovi molto denso, puoi
mettere un po’ di acqua, fino a dargli la consistenza che preferisci. Si può
ancora aggiungere sale e si mette nel frigorifero in un recipiente ben tappato.
Per quanto riguarda l’accompagnamento,
che si colloca a parte in modo che ogni commensale si serva a proprio gusto, io
ho visto di tutto, perfino cubetti di prosciutto (Ndt: tipico nel caso del salmorejo).
L’ideale è mettere a disposizione un ampio assortimento di “elementi” sempre
tagliati in piccoli dadi: pomodori, peperoni, cipolle, cetrioli, uova sode,
pane fritto, prosciutto, ecc.
Presentarlo in un recipiente grande e mettere gli accompagnamenti in vassoi individuali. Servire ben freddo in tazze da consommé. C’è chi lo beve in un bicchiere senza alcun accompagnamento.
Traduzione
spagnolo > italiano
Traducción
español > italiano
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